Hola soy Belén. Os cuento. ¡Estoy de los nervios! Nunca había estado tan pendiente de una llamada de teléfono. Estoy esperando una llamada de Jorge, mi hermano, para decirme si me deja el dinero que me falta para la deuda del banco. Me he tenido que arrastrar mucho para pedírselo pero o me arrastro ahora de esta manera o lo haré la semana que viene para buscar comida. Como no me lo deje creo que estoy perdida. ¿Cuánto darán por un riñón?... ¡Ay llamada! ¡Es él!... ¡Me lo deja!...
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